Pues que quereís que os diga... No nos ha gustado tener que llegar a esto. Ante todo he de decir que es muy duro tener que demandar a tu misma organización política para que se reconozcan los derechos que tenemos todos los militantes a participar y sumar dentro.
Mañana tenemos la vista de las medidas cautelares que hemos solicitado dentro de la demanda principal. El tema va para largo, me temo. Las carencias de medios en la Justicia afectarán indudablemente a una rápida resolución del tema.
Mucha gente nos pregunta porqué estamos peleando tanto porque se nos reconozca nuestra condición de militantes en un partido que no nos quiere y que deberíamos fundar uno nuevo, que hay espacio y simpatizantes suficientes. Pero ese no es el tema, aunque el debate interno lo tenemos, todo hay que decirlo. Creemos fundamental que se defienda a los ciudadanos en general cuando se pisotean sus derechos, tanto individuales como colectivos. No es de recibo que tenga más garantías legales y procedimentales poner una reclamación por una multa de la zona azul que consideremos injusta, que para ejercer los derechos políticos de decenas de militantes. Cuando los dirigentes de tu propio partido te venden por 30 monedas de plata se corre el riesgo de desfallecer.
Quizás esperaban eso de la Asamblea Local de Chiclana. Ese desfallecimiento. Pero se ve que somos muy cabezones. Están tan mal acostumbrados algunos cuadros de la organización, que pensaban que ibamos a ser otra muesca más en su historial de excluidos y cabreados. Nosotros no estamos cabreados. Sabemos que tenemos la razón. Jamás nos hemos opuesto a que se abriera expediente a quien tuviera que abrirsele. Así lo manifestamos siempre. Pero un expediente con garantías, con motivos, con un escrupuloso seguimiento de las normas de procedimiento... en definitiva, una cosa bien hecha y no el chapú que ha montado el camarada Macías, auténtico responsable inicial de todo este desaguisado procedimental.
Con un procedimiento justo la sanción hubiera quedado, seguramente en nada. Pero les gusta utilizar políticamente las cosas. En cerca de dos años no han sido capaces de expulsarnos porque no tenían argumentos políticos y estatutarios. Han dejado los expedientes que se abrieron caducar para no tenerlos que resolver. No se, me esperaba otra cosa de algunos compañeros. Otros me han demostrado que son gente cabal y que se creen todo esto. Mañana dos de los primeros tendrán que venir a Chiclana a declarar en el juzgado por este tema. Estaremos espectantes a ver que dicen y como explican este atropello a nuestros derechos, Diego Valderas y Antonio Roldán.
Algunos ven esto de mañana como el juicio a Valderas por las cientos de exclusiones que está perpetrando en toda Andalucía con los compañeros. No creo que sea Chiclana el centro del mundo ni el centro de la organización. Pero si que es un peldaño más que hay que subir si queremos una Izquierda Unida soberana, independiente, no subalterna y alternativa de gobierno en Chiclana, Andalucía y España. Hay que cambiar los comportamientos.