DISTANCIAS

Parece que los socios de Román en el Ayuntamiento de Chiclana comienzan sus movimientos tácticos. Ya hemos dicho en otras ocasiones que esto tenía que llegar. Es muy poco el tiempo que queda para las próximas elecciones municipales de mayo del año que viene para continuar de la mano en el mismo gobierno con el PSOE. Eso resta posibilidades electorales, y lo saben.

Tanto es así que muchos asistimos ( no perplejos, porque ya lo sabíamos) al espectáculo de las "separaciones", del marcar "distancias", del "vamos a pactar cuando vamos a hacer públicas nuestras supuestas diferencias", que hay elecciones en el horizonte y nos viene mal continuar a partir un piñon entre nosotros.

Al final son peleas en broma. De mentira. Porque, a estas alturas, ¿ quién no conoce como ha actuado siempre el PSOE de Román?. Todo el mundo en Chiclana lo sabe. Ese fue el origen del pacto cuatripartito después de las elecciones. Tanto lo sabían Polanco y Nadine Fernández, que fueron parte de ese pacto. Después les convino más personalmente cambiarse de bando y traicionar a sus votantes que provocaron una moción de censura.

Ahora intentan lavar sus imagenes, tanto los andalucistas del PSA como ese grupo de Tresmieuristas que acaban de aterrizar como quien dice en Izquierda Unida. Como diría Fumanchú, colaborador y agitador de los foros de Puente Chico "no me creo ná". ¿ O es qué ahora se han caído del caballo como Saulo camino de Damasco?. Me da que no. ¿ Ahora se dan cuenta en la renacida coalición andalucista de que no han pintado nada en ese Pacto Tapadera de la moción de censura y que sólo estaban ahí para darle de nuevo mayoría a Román y por la ambición personal de Polanco?. ¿ Ahora se dan cuenta en el seno de los Tresmieuristas de como se las gasta Román con los trabajadores, sean funcionarios o no? ¿ no nos acordamos ya de los trabajadores de la viaría, de los de la jardinería, de los de la basura, de los policias locales y de todos aquellos a los que ha perseguido durante años?.

Ahora comienza la carrera para ver quien se baja del barco antes y se pueden presentar a las elecciones sin el estigma de gobernar con quien la mayoría de los votantes chiclaneros no querían que gobernara tras las últimas elecciones municipales.

Sé que este comentario creará polémica, pero vamos, que tontos no somos, y los chiclaneros menos.